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Además de la parte mecánica, es crucial que la revision coche segunda mano también cubra aspectos relacionados con la seguridad. En este sentido, se deben verificar elementos como los frenos, las luces, los cinturones de seguridad, los airbags y otros componentes que garantizan que el coche pueda circular sin poner en riesgo a sus ocupantes o a otros conductores. Es común que quienes compran un coche usado confíen en la palabra del vendedor, pero esta confianza no debería sustituir a una revision coche segunda mano objetiva realizada por un taller de confianza o por un perito especializado. Así, se puede tener la certeza de que todos los sistemas de seguridad funcionan correctamente y que el vehículo cumple con las normativas vigentes.